Los ladrillos rojizos del Parador de Calahorra, capital de la Rioja Baja, contrastan armoniosamente con las dulces aguas de los ríos Ebro y Cidacos. La densa vegetación del jardín, lleno de flores y palmeras, se inserta en uno de los conjuntos históricos y artísticos más importantes de La Rioja. El Parador, de diseño moderno, se caracteriza por sus amplios portalones, ventanales y persianas que adornan una estructura de líneas suaves que, en el interior, opta por una decoración clásica con claras influencias medievales.
La cocina riojana se basa en la calidad de los productos de su huerta, destacando la menestra de verduras, pochas, chuletillas con pimientos y peras o melocotón al vino.
Si tu boda es civil, te proponemos celebrar el enlace al aire libre en los jardines que rodean al Parador… Apetecible, ¿verdad?